domingo, 12 de junio de 2011

Pasea tu marca bajo el sol


Uno de los fundamentos del regalo promocional es que sea útil para quién lo recibe, de lo contrario el esfuerzo económico realizado quedará, en el mejor de los casos, en el fondo de un cajón. Por eso debe elegirse cuidadosamente el objeto que pasará a ser soporte de nuestra marca o mensaje. Además, debe crear un sentimiento de agradecimiento e, incluso, de exclusividad. No debemos olvidar que nuestro objetivo final debe ser dar visibilidad a nuestra marca.

El verano es un buen momento para desarrollar una estrategia de este tipo, que permita pasear nuestro mensaje. Las personas se despojan de su ropa de trabajo (ya sea un traje y una corbata o un mono de mecánico) y visten de manera informal. Se produce una rotura de la rutina diaria y priman el ocio y el descanso. Nada más adecuado para posicionar nuestros productos.

Pero no debemos realizar una campaña porque sí. Es necesario una estrategia, y por tanto conviene contar con el asesoramiento de profesionales especializados. Vamos a hacer a continuación un repaso por los regalos promocionales más adecuados en estas fechas estivales:

  •  Camisetas. Todo un clásico. Aporta mucha visibilidad y nuestro mensaje es muy fácil de colocar. Pero en la estrategia debe primar cierta elegancia. Es mejor cierta discreción a cubrir toda la superficie con nuestro logo. Si es posible, debe huirse del color blanco.
  • Gorras. Imprescindibles para protegerse del sol, por lo que resultan una apuesta segura. Las hay de muchos tipos y acabados (y por tanto de muchos precios). Como en todo, es mejor encargar menos, pero de mayor calidad.
  •   Sombrillas. Requieren una inversión económica mayor. Su emplazamiento en playas, durante largas horas, las hacen atractivas, pero no válidas para todos los tipos de negocio.
  •   Parasoles para el coche. Otro recurso económico y que aporta mucha visibilidad. Un éxito seguro. La movilidad de los automóviles garantiza su distribución por las calles de la ciudad.
  •  Toallas. La visibilidad es menor, ya que se colocan en el suelo de playas y piscinas y a veces ni se extienden. Por el lado positivo, si son de cierta calidad, su uso está casi garantizado.

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